Los taurinos tenían razón
"Nunca vamos a pensar con claridad acerca de los animales mientras estén en nuestras mesas" Gary L Francione
Por estos días que vuelve el debate sobre la tauromaquia a boca de todos, pienso de nuevo en los individuos que serán utilizados para mantener esta tradición. Tantas cosas se ha dicho de parte y parte, y aún con todo no llegamos a la raíz del problema.
Recuerdo entonces que estando en plantones antitauromaquia algunos asistentes a la plaza, muy enfurecidos, nos decían “seguro ustedes ni son vegetarianos, hipócritas!”, nosotros enseguida, muy airadamente respondíamos “si, somos vegetarianos” y sentíamos casi que con esa sencilla respuesta les hubiéramos ganado a nuestros detractores una enorme batalla.
Habían otros aficionados taurinos que iban más allá y examinaban con cuidado nuestra vestimenta señalando entusiasmados si hallaban cuero en zapatos, bolsos o chaquetas.
Recuerdo entonces que estando en plantones antitauromaquia algunos asistentes a la plaza, muy enfurecidos, nos decían “seguro ustedes ni son vegetarianos, hipócritas!”, nosotros enseguida, muy airadamente respondíamos “si, somos vegetarianos” y sentíamos casi que con esa sencilla respuesta les hubiéramos ganado a nuestros detractores una enorme batalla.
Habían otros aficionados taurinos que iban más allá y examinaban con cuidado nuestra vestimenta señalando entusiasmados si hallaban cuero en zapatos, bolsos o chaquetas.
Seamos
justos, muchísimas veces le atinaban a una u otra cosa pues la mayoría
de personas presentes en las manifestaciones normalmente no eran veganas
o vegetarianas, y aún si hubiesen sido vegetarianas, solo les hubiera
faltado un poco de pericia a los taurinos para señalar “pero si ustedes
toman leche o comen huevos, hipócritas!”
Los señalamientos incriminatorios de las personas gustosas de la tauromaquia hacia los activistas de aquella época claramente eran una herramienta por distraer la atención. El razonamiendo al que le apostaban era el de hacer algo está bien porque todos lo hacen. Si bien este planteamiento es inmoral, y viendo las cosas ahora de manera objetiva, hay que decirlo: en parte y muy problablemente sin saberlo, los taurinos tenían razón.
Los señalamientos incriminatorios de las personas gustosas de la tauromaquia hacia los activistas de aquella época claramente eran una herramienta por distraer la atención. El razonamiendo al que le apostaban era el de hacer algo está bien porque todos lo hacen. Si bien este planteamiento es inmoral, y viendo las cosas ahora de manera objetiva, hay que decirlo: en parte y muy problablemente sin saberlo, los taurinos tenían razón.
Tenían razón en cuanto a que todas las personas de todos los lugares del planeta hemos participado de una u otra manera de la utilización de seres sintientes, convirtíendoles así en medios para nuestros fines, en propiedades. Y el uso de individuos no humanos para nuestros fines implica esclavitud independientemente que ésta se haga de forma más o menos compasiva; esclavitud que jamás contemplaríamos como aceptable si se tratara de individuos humanos.
Sería
una necedad por tanto ponernos a cuantificar las culpas relativas a quién es peor
por utilizar a los animales no humanos de una u otra forma, estimando
que la mayoría de personas hemos hecho parte de este problema muchas
veces por desconocimiento. Hacer sufrir a alguien está mal pero el
problema del especismo no se acaba eliminando el sufrimiento sino
eliminando la esclavitud.
A su vez, bajo
esta misma reflexión quisiera mencionar que el movimiento animalista
requiere razonar acerca de, si denunciado los síntomas del especismo por
a parte (circos, tauromaquia, experimentación, etc) presentándolos como
hechos aislados, logramos que el público entienda que no es casualidad
la existencia de estas prácticas puesto que están resguardadas y
naturalizadas por una ideología que es necesaria abolir, para así,
darles a los animales no humanos el lugar en el mundo que se merecen.
Cuando las personas entiendan el problema del especismo y se tomen en
serio a los demás animales entonces dejarán de utilizarlos en todas sus
formas -esto es hacerse vegano- y de esta manera eliminaremos de una vez por
todas la participación de estas personas en prácticas que esclavicen a
seres sintientes.
Promover el veganismo es promover los derechos animales, sus verdaderos derechos.
Romper nuestras cadenas mentales hará a los animales no humanos libres.
Promover el veganismo es promover los derechos animales, sus verdaderos derechos.
Romper nuestras cadenas mentales hará a los animales no humanos libres.
*Artículo recomendado No hay diferencia
Comentarios
Saludos.
David.
Concuerdo contigo en que un acto inmoral debería tener castigo, en el caso de los humanos no nos deberíamos centrar únicamente en vigilar y castigar sino en entender por qué las personas son llevadas a cometer estos actos y poner todos nuestros esfuerzos en prevenirlos.
En el caso de los no humanos, muchísimas personas están excusadas por su ignorancia y por eso cuantificar las culpas de lo que nos parece más horrible, como es el caso de la tauromaquia, resulta problemático en cuanto que ésta injusticia está respaldada por un sistema ideológico que todos hemos aprobado.
En el caso colombiano por ejemplo, el ejército se ha visto involucrado en actos terribles en donde han torturado a perros. La sociedad en conjunto los ha rechazado, muchas veces de manera violenta, sin cuestionarse en absoluto la manera en que diariamente nos relacionamos con los otros animales.
Saludos, nos encanta que te pases por acá :) Aprendemos mucho de Respuestas Veganas.
Con este artículo no pretendemos justificar la tauromaquia, sino entenderla como uno de los síntomas del especismo, y así comprender que los aficionados taurinos no son "el enemigo", solo son una muestra de una ideología que justifica a todo quien desee valerse de los no humanos como medios para sus fines.
Sin duda es positivo que las personas empaticen con los toros, pero al estar involucradas a su vez con la explotación de los toros y otros seres sintientes, los conflictos de intereses surgen, creándose una moral conveniente, del tipo que defienden los taurinos.
Por su parte, el maltrato no es el problema de raíz, si lo fuera, la esclavitud humana continuaría, sólo se hubiera reformado las condiciones de vida a las que se sometía a estas personas, el siguiente artículo explica muy bien este punto: http://www.anima.org.ar/liberacion/enfoques/lacausa.html
Saludos, ojalá podamos contar con tus comentarios en otra ocasión.
Nos fue muy difícil comprender esto que decimos en el artículo, seguramente porque los prejuicios propios son los más difíciles de cuestionar, resultándonos fácil señalar las ideas de otras personas. Paradogícamente en el especismo estamos inmuscuídos todos, ya que es el paradigma moral imperante, por eso creemos que es importante detenernos y echar un vistazo, puede que encontremos cosas en las que pensar.
Te recomendamos el enlace que pusimos en el anterior comentario, llamado "La causa de los derechos animales"
Esperamos tenerte de vuelta por este espacio, saludos
Descubrimos tu blog hace poco, ya tendremos tiempo para ensayar algunas de tus recetas.
Saludos :)